Existen dos tendencias que seguirán influyendo en nuestros planes estratégicos y en el valor que podemos crear para nuestros clientes. La primera es la miniaturización, es decir, buscar de manera continua formas de proporcionar la misma calidad de detección en productos más pequeños, puesto que los dispositivos más pequeños hacen posible acceder a más puntos de detección, por ejemplo, vasos sanguíneos más pequeños. Además, se requiere menos material para fabricar sensores más pequeños, lo que da como resultado soluciones más sostenibles en general.
La segunda tendencia es la digitalización de las señales de detección, que se conoce como detección inteligente. Abarca todo, desde la simple conversión de señales analógicas a digitales para facilitar su procesamiento, hasta el uso de la IA, el aprendizaje automático y múltiples sensores para crear un resultado a partir de esta fusión de datos. Con un gran número de modalidades de detección, conectividad y potencia, y ahora IA, TE Connectivity se encuentra en una excelente posición para capitalizar esta tendencia de rápido crecimiento.