La electrificación descarboniza las flotillas comerciales

El pasado mes de junio, el estado de California aprobó regulaciones de gran alcance sobre la electrificación de los camiones comerciales. La norma "Advanced Clean Trucks" de la Junta de Recursos del Aire de California (CARB) exige aumentar la cantidad de nuevos camiones eléctricos de cero emisiones vendidos en el estado cada año desde 2024 hasta 2045, cuando todos los camiones nuevos deben ser neutros en carbono.

En otras partes del mundo, los avances regulatorios continúan impulsando el progreso en lo que respecta a la electrificación de las flotas comerciales: en China, los vehículos comerciales ahora representan aproximadamente el 70 % de toda la nueva energía consumida en el sector de automóviles eléctricos, y en Europa, la Comisión Europea recientemente estableció como objetivo tener 80.000 camiones de cero emisiones en la carretera para 2030.

Si bien estas regulaciones y estos objetivos se encuentran entre los primeros impulsos legislativos formales para camiones eléctricos en el mundo, lo notable de ellos es que están rezagados con respecto al sector privado.

Debido a la contundente inversión en electrificación comercial por parte de pesos pesados de la industria como Amazon, FedEx, Ford Europe, General Motors BrightDrop y Hino Motors de Japón,  con miras a la obtención de importantes beneficios en el futuro , estamos viendo un enfoque bastante diferente al que el sector de los vehículos de pasajeros adoptó hace un par de décadas.

Esperamos que la electrificación comercial avance rápidamente en los próximos años, y creo que estamos en un punto de inflexión en el que la innovación del sector privado será determinante para impulsar un futuro más limpio y ecológico para los vehículos comerciales.

Con este cambio, vemos una enorme oportunidad. Gracias a nuestra inversión temprana en electrificación, estamos preparados para cosechar los beneficios de la rápida electrificación del segmento comercial. ¿Por qué? Nuestra tecnología de conectividad está diseñada para aplicaciones industriales sumamente hostiles como la minería y la construcción.

Esta tecnología de alta calidad se puede aplicar de manera satisfactoria en los vehículos comerciales, como autobuses, camiones y furgonetas de reparto, por lo que los clientes pueden tener la certeza de que superará sus necesidades relacionadas con el desgaste a causa del uso comercial diario y limitará las reparaciones y los reemplazos, un importante incentivo de ahorro de costos a largo plazo que brinda la electrificación.

La rápida urbanización y el comercio electrónico continúan impulsando la demanda de vehículos comerciales en todo el mundo: desde autobuses y camiones de basura hasta furgonetas de reparto de última milla y vehículos de carga de larga distancia. Los consumidores son quienes favorecen el desarrollo de todo este proceso, ya que exigen formas más ecológicas de comprar , desde la producción hasta la entrega. Para 2027, los investigadores de la industria esperan que tan solo el mercado de entrega de última milla alcance los USD 287.220 millones con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 5 % durante ese mismo período.

Esta vasta dimensión potencial de vehículos eléctricos comerciales presenta tanto un desafío como una oportunidad. La adopción a gran escala de vehículos eléctricos puede hacer mella en las emisiones globales de carbono. Pero a pesar del progreso y el optimismo, una gran parte de esa flota mundial (98 % en la UE, por ejemplo) continúa funcionando con combustible tradicional, y queda mucho trabajo por hacer.

Al mismo tiempo, los fabricantes de vehículos comerciales deben brindar conectividad de alta velocidad y baja latencia,  con la integridad estructural requerida para operar en entornos particularmente hostiles , mucho antes de que en el mercado comercial se adopten los vehículos totalmente eléctricos.

La solución tiene dos vertientes, y el cambio será impulsado por una combinación de enfoques basados en la electricidad y el hidrógeno. Ciertamente, las baterías son una solución viable cuando se trata de electrificar vehículos comerciales de tamaño mediano, como las furgonetas de reparto. Pero para cargas más grandes y pesadas, existen problemas de carga útil inherentes a la propulsión a batería. Las soluciones de hidrógeno, que funcionan como un reemplazo para el diésel y la gasolina, proporcionan un incentivo para lograr este futuro mejor y son una gran oportunidad para los fabricantes de vehículos comerciales.

Con soluciones de conectividad avanzada para aplicaciones que van desde entradas de carga hasta soluciones de motores y baterías, y otras funciones auxiliares, TE Connectivity está bien posicionada para colaborar con nuestros clientes en la cocreación de tecnologías complementarias para lograr un futuro eléctrico o de hidrógeno,  o que permita ambas opciones.

No existen dudas de que los fabricantes de vehículos comerciales están empezando a ver la regulación como una oportunidad y una ventaja competitiva, en lugar de solo un mandato, y están convirtiendo sus flotas mucho antes del surgimiento de medidas normativas.

Se puede observar que los fabricantes se encuentran en diferentes etapas de este proceso para alcanzar cero emisiones. Centrados en la próxima generación de movilidad, los fabricantes de equipos originales (OEM) están analizando cómo hacer que las baterías sean más eficientes y robustas y determinar si las soluciones de hidrógeno son una tecnología potencial para sus necesidades de transporte de mercancías específicas.

Con tantas soluciones en el mercado y variables en juego, los OEM necesitan un socio que entienda su negocio y desafíos específicos y que pueda trabajar estratégicamente con ellos para crear soluciones personalizadas.

TE ha trabajado activamente para lograr soluciones con bajo contenido de carbono para vehículos comerciales durante más de una década, muy por delante del mercado,  y como resultado, tenemos la cartera de alto voltaje más amplia de la industria. Trabajamos en estrecha colaboración con los clientes para ayudarlos a comprender cómo pueden construir una estrategia a largo plazo para toda su flota basada en soluciones de conectividad, eléctricas y de hidrógeno.

Creemos que un futuro mejor es posible y que las soluciones con bajo contenido de carbono para vehículos comerciales son fundamentales. Es un futuro que está llegando rápidamente y del que nos complace ser participes.

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