El futuro de la movilidad personal

Entra en la era del tránsito personal. Aunque nos sentemos y admiremos la ingeniosa complejidad del mapa del metro de Londres o la eficiencia de la red de autopistas interestatales que te llevan a todas partes de los Estados Unidos, cuando planeamos un viaje lo único que queremos es una mejor forma para llegar a casa antes de que se enfríe la cena o llegar a tiempo a una cita con esa persona especial.

"En definitiva, los planes de viaje se enfocan en la eficiencia", afirma Pete Smith, gerente senior de conocimiento de productos de sensores y capacitación en TE Connectivity. "La gente necesita ir del punto A al punto B por el medio más rápido posible".

Por ello, los investigadores dedican mucho tiempo a pensar en los problemas de transporte de la "última milla", un término que se utiliza a menudo en la gestión de la cadena de suministro para describir el último paso en el que las mercancías (en este caso, los cansados viajeros) se entregan a su destino. Estas soluciones de transporte personal van más allá de las líneas generales del transporte público, que mueven a grupos de personas por rutas programadas a través de zonas concurridas. Esto es eficiente en un panorama general, pero para los pasajeros también significa perder el tiempo esperando a que llegue el siguiente transporte programado, que avanza lentamente mientras se va deteniendo por otros pasajeros en el camino y llegar a su destino a través de una ruta indirecta.
 

Las soluciones de la última milla a veces se entrelazan y complementan los sistemas de transporte basados en el acero y el pavimento, cerrando la brecha entre un nexo de transporte y el destino final del viajero. Ahora están encontrando una nueva vida en las zonas urbanas, donde la gente llega a los centros a través del transporte público compartido antes de partir en vehículos pequeños, algunos de los cuales ni siquiera necesitan un conductor. Entre los ejemplos se encuentra un nuevo tipo de bicicletas y motocicletas eléctricas, cápsulas urbanas, automóviles pequeños y ligeros, e incluso tablas de surf eléctricas que se deslizan con rapidez sobre el agua (como esta, que se ve espectacular).

Una variedad de vehículos de corta distancia ocupa esta nueva modalidad, estacionada directamente en la intersección de la tecnología, el transporte y la energía. Reciben muchos nombres: dispositivos de transporte personal, vehículos de movilidad personal, transporte rápido personal, incluso "rideables". Si bien la historia de esta categoría está llena de obstáculos, desde los aparatosos y costosos monopatines autoequilibrados hasta la más reciente oleada de hoverboards de bajo costo y baja calidad, los vehículos de corta distancia se están poniendo de moda. Existen diversos factores motivacionales, como el creciente desplazamiento de la población hacia entornos urbanos, así como el elevado costo de la propiedad y el mantenimiento de los vehículos individuales.

Además, estas opciones económicas podrían crear oportunidades para los barrios urbanos aislados y de bajos recursos, que enfrentan problemas económicos y de movilidad que han limitado la capacidad de sus habitantes para acceder a buenos puestos de trabajo, atención sanitaria y educación.

El objetivo final, en palabras de la Agencia de Transporte Municipal de San Francisco, es "conseguir la opción de viaje más ecológica y económica en dos minutos y llegar fácilmente a cualquier lugar de la ciudad en 20 minutos".

Uno de los principales factores determinantes: los sensores. "Los sensores van a desempeñar un papel fundamental en todo esto", afirma Smith de TE Connectivity. La mayoría de estos nuevos viajes de corta distancia, menciona, integrarán una variedad de componentes de sensores y conectividad que darán lugar a un transporte personal, seguro, eficiente y útil. "La buena noticia es que los sensores están en todas partes y esto va a continuar. Las personas van a cubrir sus artículos con sensores porque querrán hacerlos inteligentes".

Además van a ir un paso más allá, añade Petrina Zaraszczak, directora de cuentas globales de sensores de TE Connectivity. "Vamos a ver muchos sensores multifunción que ocupan muy poco espacio y recabarán toda una variedad de medidas consumiendo muy poca energía". Impulsadas por la tecnología de las baterías de iones de litio y los recién descubiertos sistemas de conectividad y sensores, estas soluciones de un solo ocupante cambiarán la forma en la que recorremos distancias cortas.

Tantas opciones. Es posible que la gente todavía quiera usar automóviles para disfrutar viajes largos o para llegar a lugares fuera de la red de transporte público, pero los expertos creen que en las próximas dos décadas, millones de estos vehículos personales más pequeños serán el principal medio de transporte en las ciudades más importantes del mundo. Algunos de los más innovadores son los siguientes:

A fin de cuentas, el mayor reto del transporte personal puede tener que ver menos con la tecnología y más con la gente, la comunidad y la cultura. La tecnología permite el cambio, pero los valores dan forma a la tecnología. Mientras los diseñadores sueñan a lo grande, también apuestan por grandes experimentos conductuales. Específicamente, ¿cómo se consigue que la gente cambie sus hábitos de conducción?

El plan para intentar cambiar a la gente de sus propios automóviles individuales a los vehículos eléctricos compartidos y de funcionamiento limpio puede sonar como una buena idea, pero tenemos una relación de amor con nuestros carros que podría ser difícil de romper. "Esta es la gran pregunta: ¿estamos listos para esto?, señala Smith de TE. "Mi opinión es que todavía no, pero no falta mucho. Va a seguir siendo el Viejo Oeste durante algunos años a medida que los proveedores de tecnología evalúan la demanda de los clientes y trabajan para crear soluciones para resolver esto".